GUALCHOS. Los agentes del Seprona de Motril supieron que un ciudadano alemán había encontrado al perro convulsionando en un cortijo y lo había llevado a una clínica veterinaria.

La patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Motril ha investigado a un individuo de sesenta y tres años de edad como presunto autor de un delito de maltrato animal por el deplorable estado de salud de su perro. 

La Guardia Civil tuvo conocimiento que el pasado día 3 de enero un ciudadano alemán había entregado un perro en muy malas condiciones de salud en una clínica veterinaria de Motril. Este hombre paseaba por las inmediaciones de un cortijo del término municipal de Gualchos cuando vio un perro que estaba convulsionando. Al no ver a nadie, no lo dudó, cogió al perro y lo trasladó a la clínica.

El informe veterinario que han recibido los agentes del Seprona certificaba el mal estado del animal. Según el veterinario se trataba de un perrito de raza pequeña de unos cinco años de edad, mestizo de Yorkshire, que carecía de microchip identificador; y su estado de salud era pésimo, con pérdida de peso corporal, masa muscular y fuerza; mucosas pálidas, y lesiones cutáneas muy importantes en cuerpo y orejas. 

Tras recibir dicho informe, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Motril iniciaron una pesquisa y averiguaron que el animal pertenecía a la persona ahora investigada.